La Facultad de Letras se fundó el 22 de abril de 1974. Desde la década de los años mil novecientos cuarenta, había formado parte de la Facultad de Filosofía y Letras, cuyo primer decano fue don Jorge Volio. En 1952, con la reforma que propició el Lic. Rodrigo Facio Brenes, se creó la Facultad de Ciencias y Letras.
Con las distintas especializaciones y el incremento en las carreras y la especialización en las disciplinas, se decidió separar ambas facultades y, por eso, ya se han cumplido más de cuarenta años de tener una facultad conformada por tres escuelas (Filología, Lingüística y Literatura; Filosofía y Lenguas Modernas), y poco a poco se han ido agregando dos institutos de investigaciones (Instituto de Investigaciones Lingüísticas e Instituto de Investigaciones Filosóficas), cuatro revistas especializadas (Revista Káñina de Artes y Letras; Revista de Filología y Lingüística; Revista de Filosofía y Revista de Lenguas Modernas), una unidad de audiovisuales, sala de cómputo, servicios informáticos y la biblioteca especializada Virginia Zúñiga Tristán. Su primer decano fue el Dr. Víctor Arroyo.
En gran medida le debemos al Dr. Roberto Murillo, decano desde 1977 a 1981, la construcción de nuestro edificio. El Dr. Roberto Murillo se empeñó en que la Universidad dotara a la Facultad de Letras de su propio edificio, y el 19 de noviembre de 1982, se inauguró la primera etapa de las instalaciones ; luego, el 2 de mayo de 1988, se llevó a cabo la segunda etapa. Posteriormente se construyó un cuarto piso sobre la segunda etapa y, en la actualidad, se construirá próximamente la tercera etapa del edificio, que incluirá una terraza verde y accesos diversos a la Facultad, que asegurarán un mayor bienestar a quienes utilizan las instalaciones y a quienes más permanecen en ellas. Sean bienvenidos(as) a la Facultad de Letras de la Universidad de Costa Rica.
Historia del edificio de la Facultad de Letras
Las primeras gestiones en relación con la construcción de un edificio para la Facultad de Letras se remontan, de acuerdo con las actas del Consejo Directivo de la antigua Facultad de Ciencias y Letras, a la sesión No. 447 del 15 de febrero de 1967, presidida por el señor Decano, Dr. Gil Chaverri. En esa sesión se formó una comisión de profesores con las siguientes personas: Armando Acuña, Víctor Manuel Arroyo, Henry McGhie y Manuel Formoso, la cual se encargaría de resumir las necesidades del espacio físico y elaborar un documento que sirviera de base para la solicitud correspondiente al Consejo universitario.
Años después, en sesión No. 637 del 7 de junio de 1972, otra comisión, instaurada por el Consejo Directivo de la Facultad, entregó un informe sobre la necesidad de construir un edificio para Letras. El 22 de junio del mismo año, en en sesión No. 640, el señor Decano Chester Zelaya informó que la solicitud, para construir con carácter urgente un edificio para la Facultad de Letras, había sido acogida por el Consejo Universitario y se encomendó al señor rector Dr. Claudio Gutiérrez Carranza para que presentara un plan de financiación. El 11 de octubre del mismo año, en sesión No. 649 del Consejo Directivo, el Decano Zelaya presenta un amplio informe sobre el edificio de Letras en presencia del Arquitecto Humberto Malavassi. En este informe se indicaba la necesidad de construir aulas especiales de proyección, laboratorios, un auditorio, sala-cafetería, etc. Posteriormente, en la sesión del 30 de noviembre de 1972 se acordó tramitar, ante el señor Rector, las decisiones de ese Consejo sobre la construcción del nuevo edificio.
El 2 de febrero de 1973, el señor Decano informó en sesión No. 655 sobre las dos últimas sesiones del Consejo Universitario, en las que se trató de la distribución de la planta física en la Universidad y de la aprobación de una partida de dos millones y medio de colones para la construcción del Edificio de Letras y de Ciencias Sociales.
Cuatro años después, en la Asamblea de Facultad No. 13 de; 4 de agosto de 1977, siendo Decana la Lic. Virginia Sandoval de Fonseca, nuevamente se conocieron otras gestiones hechas para resolver el problema del espacio físico de la Facultad de Letras. En dicha sesión estuvo presente el Ingeniero Edmundo Aguilar, quien se refirió al estudio preliminar de la recién creada, Oficina Ejecutora del Plan de Inversiones (OEPI), encargada de planificar las ampliaciones de las diferentes Facultades y Escuelas de la Universidad. Estos estudios toman en consideración los ya realizados en 1973 y que contemplaban la ampliación del Edificio de Letras en forma de “T” o en las zonas cercanas que ocupaban un bosque. Ambas posibilidades fueron desaconsejadas pues el espacio con que se contaba era muy pequeño. También se sugirió la posibilidad de construir la Facultad en las Finca 1 o en la Finca 2 de la Universidad, camino a Sabanilla. Esta posibilidad fue presentada como alternativa, no como solución. Las conversaciones tenían como meta iniciar la construcción en 1978, previo estudio de una lista de necesidades que tenían que ser indicadas por los miembros de la Facultad.
En esta oportunidad, los estudios llevados a cabo por la Decana Sandoval de Fonseca y el Director de Estudios Generales, contemplaban un “Resumen de necesidades de espacio físico para la Facultad de Letras y la Escuela de Estudios Generales”, cuya construcción podría ser iniciada en 1979.
El nuevo Decano de la Facultad, Dr. Roberto Murillo, continuó con esmero y tesón las gestiones para la construcción del Edificio de Letras. En sesión extraordinaria número 16, celebrada el 23 de mayo de 1978, por la Asamblea de la Facultad de Letras, se conocieron, entre otros puntos, las ofertas y posibilidades que presentaba el señor Rector Claudio Gutiérrez, respecto a la construcción del futuro edificio que podría ser ubicado en un terreno de la Universidad, llamado el terreno de Betania, o en el de la denominada Finca de la Investigación.
En sesión número 17 (extraordinaria) celebrada por la Asamblea de la Facultad de Letras, el 21 de julio de 1978, y presidida por el Decano Roberto Murillo Z., se decidió el emplazamiento definitivo del Edificio de la Facultad de Letras, en el terreno de Betania, más un terreno de un cuarto de manzana que compraría la Universidad y, en sesión No. 19 (extraordinaria) de la Asamblea de la Facultad de Letras, del 28 de mayo de 1979, se aprobó el anteproyecto presentado por la Oficina Ejecutora del Pla de Inversiones (OEPI), a cargo del Ingeniero Edmundo Aguilar. El arquitecto diseñador era el señor Humberto Malavassi. El proyecto final, coordinado estrechamente con el Consejo Asesor de la Facultad de Letras, se concluyó en junio de 1980.
En marzo de 1981 aparece en el Diario Oficial “La Gaceta”, la licitación pública No. 605 “Construcción del Edificio de Letras”, en la cual participaron siete empresas. La licitación fue adjudicada a la Empresa Constructora DIA LTDA., la que emprendió la obra en colaboración con el equipo profesional del OEPI, con cuyo esfuerzo conjunto logró llevar a feliz término la obra.
El 23 de setiembre de 1982, el gerente de la Empresa Constructora DIA LTDA., Ingeniero José Manuel Agüero Echevarría, entrega al Dr. Fernando Durán Ayanegui, Rector de la Universidad de Costa Rica, y al nuevo Decano, Dr. José Alberto Soto Badilla, el edificio para la Facultad de Letras, en su primera etapa, el cual tiene un área de 3336 metros cuadrados y un valor aproximado de 18 millones de colones.
Queda pendiente otra parte del Edificio, donde se ubicarán laboratorios, aulas, cafetería y el auditorio. Creemos, de acuerdo con la historia aquí recorrida, que con el esfuerzo conjunto de profesores, alumnos y administrativos de la Facultad de Letras, quizás lograremos ver terminado todo el complejo en construcción a inicios de la última década de este siglo. Entre tanto, esperamos pacientemente que el Edificio sea amueblado para trasladar la Facultad de Letras a sus nuevas instalaciones.
Dr. José Alberto Soto Badilla, 1982